Comunicadores de la Argentina (COMUNA) rechaza las agresiones sufridas por
varios trabajadores de prensa durante la movilización opositora del 8 de
noviembre.
Los ataques de diverso tipo a varios colegas, de medios públicos y
privados, constituye una expresión de intolerancia que choca de lleno con la
pretendida "libertad de expresión" que algunos de los participantes decían
reclamar.
La difusión amplia que el acto opositor tuvo antes y después de su realización evidencia que el Estado argentino garantiza las condiciones para la difusión de las ideas, para ejercer el derecho a peticionar y reclamar, y que hace posible que el espacio público sea usado con esos fines.
La difusión amplia que el acto opositor tuvo antes y después de su realización evidencia que el Estado argentino garantiza las condiciones para la difusión de las ideas, para ejercer el derecho a peticionar y reclamar, y que hace posible que el espacio público sea usado con esos fines.
COMUNA reitera que el cumplimiento de las leyes debe alcanzar a todos
los argentinos por igual, sin ninguna excepción, incluyendo a los intolerantes y
violentos y a quienes, con afán de lucro, se oponen a que haya más voces, más
debate y más pluralismo en el país.
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