Colón-Unión
Domingo, 18 de noviembre de 2012En un partido con incidentes, Colón le ganó el clásico santafesino a Unión
Colón se impuso en el clásico por 2-0 con goles, de Lucas Mugni y Emmanuel Gigliotti. En el Rojinegro fue expulsado Adrián Bastía. Con esta victoria, el Sabalero superó en el historial a Unión por un encuentro.
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El clásico santafesino quedó en manos de Colón.
Fuente: Manuel Testi/Diario UNOovacion@unosantafe.com.ar
Colón ganó el partido que estaba obligado a ganar. No sólo por los últimos antecedentes, sino también por el presente del rival que tenía enfrente. Y lo hizo con mucha autoridad, siendo muy superior a Unión e, incluso, debiendo ampliar el resultado, ya que desperdició varias situaciones concretas de gol.
El partido se dio como se preveía, con el equipo local buscando el resultado y con la visita esperando para jugar de contra. Ya al minuto de juego, Lucas Mugni tuvo la chance de abrir el marcador, pero Alejandro Pérez desvió el remate que tenía destino de red.
Con un gran trabajo de Iván Moreno y Fabianesi por derecha, acompañado por Facundo Curuchet, el elenco rojinegro volcó el ataque por el sector derecho ante las enormes dudas que mostró Maximiliano Lugo. Curuchet estuvo a punto de marcar en el minuto 19 tras un grosero error de Lugo pero Diego Barisone salvo en la línea. El primer gol del Sabalero demoró más de la cuenta, ya que debió esperar a que marcaran el descuento para comenzar a enderezar la historia que asomaba complicada.
La figura de ese primer tiempo fue Moreno, quien en el epílogo de la primera etapa construyó una muy buena jugada con la participación de Curuchet, para luego el Torero cederle el balón a Mugni, quien a la carrera y de zurda sometió a Martín Perafán para romper la paridad.
Antes, Emmanuel Gigliotti desperdició una situación inmejorable, cuando entrando al área remató a la carrera y el arquero rojiblanco le detuvo el disparo y, en el rebote, nuevamente le ganó el duelo a Lucas Mugni. En esos 45 minutos, Unión apenas pudo fabricar una chance de gol cuando Andrés Franzoia quedó cara a cara con Diego Pozo, y el arquero Sabalero le ahogó el grito de gol y luego Ronald Raldes la terminó despejando.
El dominador de esa primera etapa fue Colón y, en consecuencia, el resultado se ajustaba al trámite de juego, más allá de que el gol debió llegar antes de no mediar el muy buen trabajo de Martín Perafán. La expulsión de Maximiliano Lugo, a los 28 minutos, tras una dura infracción a Curuchet, comenzó a inclinar el partido en favor del equipo local, que con el gol de Mugni consiguió la tranquilidad necesaria
El complemento
Con la ventaja en el resultado y un hombre de más, daba la sensación que el equipo conducido por Roberto Sensini iba a tener un segundo tiempo propicio para estirar las cifras. Sin embargo, en los primeros minutos los delanteros de Colón se iban a encargar de desperdiciar todo tipo de favores que le brindaba la defensa rojiblanca.
A los 3 minutos un centro perfecto de Moreno por el sector derecho, derivó en la cabeza del Puma Gigliotti, quien con todo el tiempo del mundo para elegir dónde ubicar el balón, ejecutó mal y Perafán se la tapó con las piernas. Y, en el minuto 15, Curuchet quedó cara a cara con el arquero visitante y, en vez de ceder a un compañero, remató débil para prolongar la angustia de los hinchas que observaban atónitos las situaciones malogradas.
Encima a los 17 minutos Adrián Bastía, quien estaba amonestado desde la primera etapa, derribó en la mitad de la cancha a Matías Donnet, y Germán Delfino de manera correcta le mostró la segunda amarilla y luego la tarjeta roja. Fueron minutos de incertidumbre para el rojinegro dado que Unión se adelantó algunos metros sin inquietar, pero sabiendo que estaba a un gol de la hazaña.
Bastó una nueva equivocación en la defensa de Unión para que el Puma Gigliotti, quien venía con la mira torcida, aprovechara el regalito y a la carrera definiera junto al palo derecho para establecer el 2-0 y definir el pleito. El gol debió anularse ya que Curuchet, que estaba adelantado, quiso participar de la jugada, más allá de que no tocó el balón.
La victoria ante Unión trajo muchísimo alivio en el plantel, y la muestra de ello fue el festejo que desataron los jugadores y los hinchas en la cancha y en el vestuario. Es cierto que se le ganó al último, pero para todos los presentes ayer se saldó una deuda de años.
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