LEANDRO BUSATTO
El ex Gobernador de Santa Fe y actual conductor del FAP, el "caprilista" Hermes Binner declaró - sin ruborizarse - a los medios de comunicación que: "Los muertos en Venezuela son consecuencia de estos gobiernos populistas", desnudando con crudeza que el socialismo que encarna es simplemente una construcción artificiosa, vacía de contenido y profundamente alejada de lo popular y evidenciando - particularmente su figura - que es un mamarracho político con sesgos fascistas.
Binner debería saber que los muertos, los heridos, los sabotajes y las tomas a los locales del PSUV, fueron provocados por la derecha más reaccionaria, intolerante y golpista de América Latina, que se niega a reconocer los resultados de una elección democrática, popular y participativa, que ratificó un proyecto de país que viene gobernando Venezuela desde hace 14 años.
No es la primera vez que estos sectores se manifiestan por la fuerza. Ya en abril del año 2002, con la complicidad de los medios de comunicación dieron un golpe de estado contra el Presidente Chávez, quien luego fue repuesto en el poder por el pueblo. En ese golpe de estado participaron los sectores de la derecha venezolana, varios de los principales medios de comunicación, integrantes de los sectores económicos más concentrados de Venezuela y los altos mandos de las Fuerzas Armadas.
Inclusive el candidato a Presidente por la derecha venezolana, Enrique Capriles Radonski, fue filmado y registrado como uno de los actores principales en el intento frustrado de tomar por las armas la Embajada de Cuba en Venezuela y desalojar al personal diplomático y a los cubanos residentes en el país.
Con sus declaraciones Binner muestra un profundo desprecio por los procesos democráticos y populares que se dan en América Latina y en Venezuela, apoyando a los sectores más concentrados de la economía nacional y transnacional, que hostigan y han hostigado durante años al pueblo y de los que, Enrique Capriles Radonski es su referencia política.
Estamos convencidos que no es el pueblo quien genera muertes o violencia. Son los sectores que han oprimido históricamente al pueblo venezolano y que hoy ven peligrar sus intereses coorporativos, los que embisten contra el proceso popular, pretendiendo desconocer los legítimos resultados de un sistema electoral que ha sido elogiado en todo el mundo por su transparencia, valiéndose del terror para alcanzar sus oscuros objetivos.
Binner tendría que explicarle a la sociedad argentina, antes de preocuparse por los muertos de Venezuela y juzgar al Gobierno de Chávez, que pasó con los 39 muertos que dejó el Gobierno de la Alianza, encabezado por Fernando de la Rúa y de la cual él formó parte, que fuera responsable de sumir al país en la ruina económica, social y política.
También sería bueno que Binner se haga cargo, junto con el Gobernador Antonio Bonfatti, de haber sido responsables de la peor política de seguridad en la Provincia de Santa Fe. Demostrando una incapacidad manifiesta para brindar respuestas a una demanda social acuciante y creciente, con el agravante de haber colocado a parte de la institución policial al servicio del delito y del narcotráfico. Esta falta de política en materia de seguridad, le costó a la Provincia vidas inocentes, contabilizando un trágico saldo de más de 250 muertos durante 2012 en sus dos principales centros urbanos, estadística que va en crecimiento en lo que transcurre del año.
El caprilista Binner, el nuevo representante del conservadurismo y la derecha en la Argentina, el que justifica los muertos por considerarlos consecuencias de gobiernos a los que él tilda despectivamente como populistas, está mostrando su verdadera faceta. Queda absolutamente claro que, a medida que los procesos populares se profundizan y avanzan, la careta de los pseudo progresistas se va cayendo, dejando ver el verdadero rostro de ciertos sectores antidemocráticos, antipopulares y fascistas, siendo el FAP y el propio Hermes Binner, los mejores ejemplos.
"Binner expresa la derecha más recalcitrante de la Argentina"
Lo dijo el diputado provincial luego de las declaraciones del ex gobernador sobre los muertos en Venezuela.
Leandro Busatto salió al cruce de los dichos del líder del FAP
El ex Gobernador de Santa Fe y actual conductor del FAP, el "caprilista" Hermes Binner declaró - sin ruborizarse - a los medios de comunicación que: "Los muertos en Venezuela son consecuencia de estos gobiernos populistas", desnudando con crudeza que el socialismo que encarna es simplemente una construcción artificiosa, vacía de contenido y profundamente alejada de lo popular y evidenciando - particularmente su figura - que es un mamarracho político con sesgos fascistas.
Binner debería saber que los muertos, los heridos, los sabotajes y las tomas a los locales del PSUV, fueron provocados por la derecha más reaccionaria, intolerante y golpista de América Latina, que se niega a reconocer los resultados de una elección democrática, popular y participativa, que ratificó un proyecto de país que viene gobernando Venezuela desde hace 14 años.
No es la primera vez que estos sectores se manifiestan por la fuerza. Ya en abril del año 2002, con la complicidad de los medios de comunicación dieron un golpe de estado contra el Presidente Chávez, quien luego fue repuesto en el poder por el pueblo. En ese golpe de estado participaron los sectores de la derecha venezolana, varios de los principales medios de comunicación, integrantes de los sectores económicos más concentrados de Venezuela y los altos mandos de las Fuerzas Armadas.
Inclusive el candidato a Presidente por la derecha venezolana, Enrique Capriles Radonski, fue filmado y registrado como uno de los actores principales en el intento frustrado de tomar por las armas la Embajada de Cuba en Venezuela y desalojar al personal diplomático y a los cubanos residentes en el país.
Con sus declaraciones Binner muestra un profundo desprecio por los procesos democráticos y populares que se dan en América Latina y en Venezuela, apoyando a los sectores más concentrados de la economía nacional y transnacional, que hostigan y han hostigado durante años al pueblo y de los que, Enrique Capriles Radonski es su referencia política.
Estamos convencidos que no es el pueblo quien genera muertes o violencia. Son los sectores que han oprimido históricamente al pueblo venezolano y que hoy ven peligrar sus intereses coorporativos, los que embisten contra el proceso popular, pretendiendo desconocer los legítimos resultados de un sistema electoral que ha sido elogiado en todo el mundo por su transparencia, valiéndose del terror para alcanzar sus oscuros objetivos.
Binner tendría que explicarle a la sociedad argentina, antes de preocuparse por los muertos de Venezuela y juzgar al Gobierno de Chávez, que pasó con los 39 muertos que dejó el Gobierno de la Alianza, encabezado por Fernando de la Rúa y de la cual él formó parte, que fuera responsable de sumir al país en la ruina económica, social y política.
También sería bueno que Binner se haga cargo, junto con el Gobernador Antonio Bonfatti, de haber sido responsables de la peor política de seguridad en la Provincia de Santa Fe. Demostrando una incapacidad manifiesta para brindar respuestas a una demanda social acuciante y creciente, con el agravante de haber colocado a parte de la institución policial al servicio del delito y del narcotráfico. Esta falta de política en materia de seguridad, le costó a la Provincia vidas inocentes, contabilizando un trágico saldo de más de 250 muertos durante 2012 en sus dos principales centros urbanos, estadística que va en crecimiento en lo que transcurre del año.
El caprilista Binner, el nuevo representante del conservadurismo y la derecha en la Argentina, el que justifica los muertos por considerarlos consecuencias de gobiernos a los que él tilda despectivamente como populistas, está mostrando su verdadera faceta. Queda absolutamente claro que, a medida que los procesos populares se profundizan y avanzan, la careta de los pseudo progresistas se va cayendo, dejando ver el verdadero rostro de ciertos sectores antidemocráticos, antipopulares y fascistas, siendo el FAP y el propio Hermes Binner, los mejores ejemplos.
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