Changui Cáceres: "Barletta tendría que apuntar a ser reelecto"
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Coherente. "Estoy obligado conmigo mismo", dijo Cáceres, que llevará su candidatura hasta el final.
Luis Changui Cáceres dice que lo único que lo anima a presentarse como candidato a gobernador por el Frente Progresista es el pedido de "los amigos radicales" que no se sienten contenidos ni identificados con el intendente de Santa Fe. "Es falso que toda la UCR está con (Mario) Barletta", dispara.
El Changui cree que el sistema de boleta única lo beneficia porque, a diferencia de Barletta, a él lo conocen en todo el territorio santafesino. "Soy una persona que la conocen en toda la provincia, a pesar de que me llenaron de bosta una y mil veces", sostiene, pero sin hacer nombres propios. Sólo aclara, para graficar la traición, que tiene tantos cuchillos clavados en la espalda "que un alfiletero no es nada al lado mío".
Cáceres, en una entrevista con La Capital, dijo además que lo más conveniente para Barletta es presentarse a un nuevo período en la municipalidad de Santa Fe y dejar para más adelante sus aspiraciones de ser gobernador.
-¿Qué lo animó a competir en una interna donde el partido tiene ya a su candidato preferido?
-La UCR fue intervenida arbitrariamente por el comité nacional por haber ido con candidatos propios en las elecciones pasadas. Al ser intervenidos, no nos presentamos al proceso electoral interno y dimos libertad de acción. Eso nos dejó muy debilitado en la nueva conformación de las listas. Pero eso no quiere decir que los que conducíamos el partido hace poco tiempo atrás no mantengamos cuadros militantes y dirigentes políticos en todos los departamentos de la provincia.
-¿Todos esos dirigentes le piden que encabece una especie de resistencia en el partido?
-No es resistencia. Cuando viene este proceso electoral, los que están en el partido dicen va a ser candidato fulano, mengano, sultano. Dicen que los legisladores se van a repartir de una determinada manera, y la gente que ha llevado una vida de militancia y de esfuerzos no estaba ni siquiera computada. Los que te llaman a la organicidad son los que inorgánicamente te desplazan.
-¿Se siente subestimado, traicionado?
-No, a estas alturas tengo tantos cuchillos clavados en la espalda que un alfiletero no es nada al lado mío. Simplemente estaba en otra, pero los amigos me plantean de que, frente a un cuadro de situación de este tipo, no se sienten ni contenidos ni motivados. Dicen "o hacemos una lista o directamente nos vamos". Porque es falso que todo el radicalismo esté detrás de la candidatura del intendente (Barletta).
-¿Está en una situación donde no hay vuelta atrás o puede llegar a acordar?
-Uno nunca niega la posibilidad del diálogo. Pero quiero ser claro en esto: estoy cansado de hipocresía y de malas interpretaciones. Yo no sé cuál es el problema. Un partido que integra un frente tiene que definir objetivos comunes y, a partir de allí, por consenso o decisión de la gente, seleccionar los candidatos más competitivos para el bien de todos. Me parece perfecto que el gobernador tenga su delfín y lo quiera poner. Me parece perfecto que otro socialista se sienta con méritos, caso Giustiniani, que ha disputado esa plaza. Dentro de la UCR, el intendente de Santa Fe legítimamente quiera disputar la Gobernación. Nosotros salimos a la disputa. Esta nueva legislación no me asusta.
-La boleta única desengancha, por ejemplo, a los intendentes del candidato. ¿Qué evaluación hace de la nueva ley?
-Me parece perfecto eso. ¡Que se saquen la careta! No hay democracia fuerte sin partidos políticos fuertes. Ahora, los partidos están hecho bosta y buena parte de esta gente tiene responsabilidad. Está la paradoja que esta ley fue votada por los legisladores del Frente Progresista y hoy la miran como si fuera una ley de la dictadura. Hay que tener un poco de coherencia. Esta ley te deja librado a tus fuerzas, y no me calienta a quién va a terminar beneficiando. Yo soy una persona que la conocen en toda la provincia, a pesar de que me llenaron de bosta una y mil veces. Soy el mismo, no tengo una moneda afuera ni adentro. No tengo acciones en ninguna empresa. Yo salgo para que las personas valiosas que la dejaron de lado tengan una oportunidad de llegar.
-¿Cree, entonces, que tiene más ventaja que Barletta?
-Yo no puedo pedir disculpas por tener una militancia que pasa el medio siglo; por haber empezado a defender la educación; por haber luchado contra la dictadura militar, en los años que militaba por la candidatura de Aldo Tessio cuando ni su propia familia lo hacía. No puedo pedir disculpa por mi lucha en defensa de los derechos humanos.
-¿Le parece buena la gestión de Barletta?
-Me parece que tendría que apuntar a ser reelecto en Santa Fe y desde allí apuntalar, para más adelante, un proceso para la Gobernación.
-¿Va a sostener su candidatura hasta el final?
-Estoy obligado conmigo mismo, con la coherencia de una vida. Yo no chacoteo con este tipo de cuestiones.
-¿Con quién va a armar fórmula?
-Con alguien de Rosario y si es mujer, mejor. El esquema en el que avanzamos es tratar de armar la mejor lista con la mejor gente. Si son afiliados a la UCR, en buena hora, si no son afiliados y son buena gente, adelante con los faroles.
-Como radical, ¿quién cree que debe encabezar el liderazgo del partido a nivel nacional?
-A mí me pidió que le de una mano Ricardo Alfonsín. Fue el único que me lo pidió. Yo hablé con mis amigos y estuvimos de acuerdo. Nos pareció lógico, aunque nuestra relación no es la misma que teníamos con Raúl, con quien estuvimos trabajando 40 años codo a codo y fui su referente en la provincia de Santa Fe. Nos pareció natural darle una mano.
-¿Ese respaldo va a ser correspondido?
- No suelo pedir correspondencia.
La Capital
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