lunes, 29 de abril de 2013

UN DESAYUNO CON RICARDO FORSTER

“Hay una continuidad en la ruptura”


 
Por Fernando Cibeira
Filósofo y ensayista, Ricardo Forster está cada vez más metido en las cuestiones de la actualidad –en su papel de defensor teórico del modelo kirchnerista–, tanto que se lo menciona con insistencia como posible candidato para las elecciones legislativas de octubre. “No tengo ninguna noticia. A mis 55 años es una cuestión que me genera dudas, pero obviamente que si hubiera un ofrecimiento de esa naturaleza sería muy difícil negarme”, anticipa. Mientras, se prepara para presentar dos nuevos libros en la Feria, uno sobre Nicolás Casullo y, el otro, el cuarto sobre el kirchnerismo, movimiento al que sigue considerando una “anomalía”, de ahí el título La anomalía kirchnerista, igual al de una columna que alguna vez publicara en Página/12. “Sí, aunque pasó una década, continúa siendo una suerte de anomalía, podríamos decir que hay una continuidad en la ruptura”, argumenta.
Forster vive desde hace muchos años en un pasaje con nombre de filósofo griego en Coghlan, un oasis de tranquilidad en medio de la ciudad. La entrevista es en un bar nuevo, aunque ambientado como un almacén viejo, a unas pocas cuadras, con el sol ingresando por grandes ventanales. Aquí nada anuncia que en otro extremo de la Capital la Policía Metropolitana desaloja a fuerza de palos y balas de goma el Hospital Borda. Por ahora, la principal noticia es la aprobación de los proyectos de reforma judicial en Diputados, algo que para Forster constituye otra prueba de ese núcleo de ruptura e invención con el que sigue identificando al kirchnerismo. “No era una cuestión necesaria en este momento, pero de repente coloca un tema muy significativo para repensar la democracia”, explica.
Es que argumentos nunca le faltan a Forster, que pareciera tener cualquier tema ya pensado y analizado. Uno de ellos tiene que ver con la cuestión del conflicto, otro de los rasgos distintivos del kirchnerismo. El interrogante es si se puede mantener el conflicto de manera continua o si no llega el momento en que la sociedad –o al menos una parte de ella– se agota. “Hay una idea de que el conflicto es destructivo, para mí es todo lo contrario. Es un ensanchamiento de los límites de la democracia y quiere decir que hay cosas que no están resueltas”, explica. Y añade que quienes hoy más echan mano al argumento de la polarización son los opositores, sobre todo la “oposición mediática”. “Es la construcción de un país en negro. No puede ser que no puedan decir que por lo menos algo pasó en educación, algo pasó en ciencia, en la relación con América latina, en la cuestión de los derechos civiles”, sostiene.
Ese rechazo cerrado lo ubica principalmente en sectores de la clase media acomodada urbana que protestaron días atrás. “Yo viajo mucho por el país y no percibo ese odio en otros sectores”, define. Recuerda que eso sucedió cada vez que el peronismo interpeló al poder. “Como explicaba Casullo, cuando ocupó un lugar que podríamos llamar de centroizquierda. Sucedió durante el primer peronismo, en el camporismo y ahora”, afirma.
El nombre de Casullo aparecerá varias veces durante la charla. También filósofo y escritor, Casullo compartió con Forster una cátedra en la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA, la conducción de la revista Pensamiento de los confines y la conformación del Espacio Carta Abierta. Falleció en 2008 y ahora Forster presentará el libro Nicolás Casullo, semblanza de un intelectual comprometido.
“Está lindo este bar, ¿no?”, se alegra Forster por la novedad de un café al que ahora puede ir para alternar un poco cuando trabaja demasiadas horas en su casa. Explica que el amplio boulevard que parquiza la calle Holmberg estuvo a punto de quedar sepultado bajo una autopista y que la protesta de los vecinos consiguió salvarlo y a nosotros disfrutar de este sol. Pero estábamos en la clase media y en si constituye una causa perdida para el kirchnerismo. “No, sigue siendo importante que un movimiento popular como el kirchnerismo interpele a la clase media, y puede hacerlo con sus políticas de ampliación de derechos, como fue la ley del matrimonio igualitario. La reforma judicial era interesante también, pero quedó muy atrapada en la discusión con la oposición. Por eso creo que sería interesante que proponga la disputa en torno del aborto”, propone. El tema, que la presidenta Cristina Kirchner ha dicho que rechaza, por ahora no está en la agenda.
Forster le critica a la oposición que ni siquiera tenga una agenda propia sino que “es creada por la estrategia del Grupo Clarín”. También habla de la conducción de “un tándem destructivo”, por la diputada Elisa Carrió y el periodista Jorge Lanata. “Con sus denuncias en el Congreso, Carrió dañó a la misma oposición. Es un discurso caníbal que asusta hasta a la clase media”, analiza. Le apunta al centroizquierda que vendría a representar el FAP. “¿Qué es? ¿Binner diciendo que votaría a Capriles y que el populismo es el culpable de las muertes en Venezuela? ¿Qué país presentan? No lo dicen”, afirma. Forster recuerda el lugar común que habitualmente plantea que hace falta una oposición fuerte. “Sí, pero una que lleve al kirchnerismo a no estancarse. Por ejemplo, una oposición que cuestione las políticas extractivistas o la política de transporte, no una que siga los títulos de los diarios”, agrega.
Es de los que plantean que sería necesaria una reforma constitucional. “Es un momento histórico, como salir de las trabas de la Constitución del ’94”, elabora Forster. Pero el problema, enseguida subraya, es que la iniciativa quedaría fatalmente atrapada en la problemática de la reelección presidencial. “Los liderazgos son muy difíciles de reemplazar”, responde sobre la continuidad de CFK. “Pero los proyectos tienen que encontrar la capacidad de continuidad de lo mejor de sí mismos, sabiendo que los liderazgos no son eternos”, define. Su celular suena en varias ocasiones durante el desayuno, casi siempre para pedir alguna entrevista. “Sí, llamame en un ratito”, responde al fin. Momento de terminar el café.

No hay comentarios:

Publicar un comentario