Y LA POLÉMICA YA SE DESATÓ
Impulsan el tributo de profesionales para financiar becas de terciarios y universitarios
Mediante un proyecto del diputado Leandro Busatto, del Frente para la Victoria, se pretende instaurar un impuesto a los graduados que se desempeñan en profesiones liberales. El objetivo es financiar los estudios de otros jóvenes que cursan en la actualidad. El gravamen se descontaría de lo facturado anualmente o, en su defecto, el pago de un mínimo mensual. Desde el Colegio de Abogados se reconoce como "noble" la intención, pero se advierte sobre las dificultades para cumplir con un nuevo tributo.
27.08.2012 | 07:16 hs.· Autor: ML· Fuente: Notife/LT10
Mediante un proyecto de ley, impulsado por el diputado Leandro Busatto junto a su par Ricardo Olivera, se propone crear el Instituto Provincial de Solidaridad Educativa el cual se financiaría con el tributo de los denominados profesionales liberales. Esto es, comprendería a los abogados, contadores, arquitectos y médicos, entre otros campos disciplinares. “Apoyados en un criterio de solidaridad intergeneracional, y apelando a nuestra memoria como estudiantes, y con la posibilidad de graduarnos de una universidad pública, hemos elaborado este proyecto que plantea un impuesto a las profesiones liberales para la formación de un institutito abocado a otorgarles becas a los jóvenes santafesinos para que puedan realizar sus estudios universitarios o terciarios”, explicó el propio Busatto, este lunes, en conversación con LT10.
En tal sentido, el legislador del Frente para la Victoria (FpV) expuso que la idea es deducir el tributo de la recaudación anual del profesional. “Pensamos en un impuesto que grava el dos por ciento del neto anual. En el caso de no cubrir ese dos por ciento, planteamos pagar un mínimo mensual que implique el cuatro por ciento de un salario mínimo vital y móvil, algo así como 92 pesos por mes. Lo cual puede quedar sujeto a modificación y a discusión. Pero creemos importante crear un vínculo de solidaridad”, subrayó. Así también, precisó que la propuesta abordaría especialmente a aquellos profesionales que en la actualidad no tributan ingresos brutos, por ejemplo, al fisco provincial.
Ante los alcances del proyecto planteado, desde el Colegio de Abogados de Santa Fe se alertó sobre las complicaciones que podría generar en la práctica. El titular de la institución, Eduardo Massot, no cuestionó “los objetivos nobles respecto a las becas para los jóvenes que no pueden acceder a la educación”. “Pero es preocupante desde el punto de vista profesional. También tributamos a nivel nacional, pagamos nuestra Caja de Jubilación. De cada cien pesos, el 20 por ciento va a Caja de Seguridad Social, 9,3 por ciento va a Caja Forense en algunos casos. Además, la alícuota que se está pensando es altísima para un profesión liberal”, postuló en diálogo con la misma radio universitaria.
A esos gastos, acorde a lo dicho por Massot, el profesional debe pagar “electricidad, alquiler…”. “Es noble el objetivo que se busca, pero me parece que la fuente de financiamiento debe ser estudiada detenidamente”, remarcó el letrado.
En esa misma línea, abogó por un debate profundo sobre “la educación gratuita”. “El tema es quién paga la educación de los universitarios. ¿Es el correcto el funcionamiento de las universidades? Un profesional de cuatro o cinco años no está en condiciones de pagar ese impuesto. Los recién recibidos no tienen posibilidades”, enfatizó Massot.
En tal sentido, el legislador del Frente para la Victoria (FpV) expuso que la idea es deducir el tributo de la recaudación anual del profesional. “Pensamos en un impuesto que grava el dos por ciento del neto anual. En el caso de no cubrir ese dos por ciento, planteamos pagar un mínimo mensual que implique el cuatro por ciento de un salario mínimo vital y móvil, algo así como 92 pesos por mes. Lo cual puede quedar sujeto a modificación y a discusión. Pero creemos importante crear un vínculo de solidaridad”, subrayó. Así también, precisó que la propuesta abordaría especialmente a aquellos profesionales que en la actualidad no tributan ingresos brutos, por ejemplo, al fisco provincial.
Ante los alcances del proyecto planteado, desde el Colegio de Abogados de Santa Fe se alertó sobre las complicaciones que podría generar en la práctica. El titular de la institución, Eduardo Massot, no cuestionó “los objetivos nobles respecto a las becas para los jóvenes que no pueden acceder a la educación”. “Pero es preocupante desde el punto de vista profesional. También tributamos a nivel nacional, pagamos nuestra Caja de Jubilación. De cada cien pesos, el 20 por ciento va a Caja de Seguridad Social, 9,3 por ciento va a Caja Forense en algunos casos. Además, la alícuota que se está pensando es altísima para un profesión liberal”, postuló en diálogo con la misma radio universitaria.
A esos gastos, acorde a lo dicho por Massot, el profesional debe pagar “electricidad, alquiler…”. “Es noble el objetivo que se busca, pero me parece que la fuente de financiamiento debe ser estudiada detenidamente”, remarcó el letrado.
En esa misma línea, abogó por un debate profundo sobre “la educación gratuita”. “El tema es quién paga la educación de los universitarios. ¿Es el correcto el funcionamiento de las universidades? Un profesional de cuatro o cinco años no está en condiciones de pagar ese impuesto. Los recién recibidos no tienen posibilidades”, enfatizó Massot.
No hay comentarios:
Publicar un comentario