El avance sobre la justicia / Estrategia de la casa rosada y reacción opositora
El Gobierno cree que la Corte juega un "rol político" en la campaña
Política
La Presidenta ordenó a Echegaray responderle a Lorenzetti para contrarrestar el comunicado del máximo tribunal; dicen que asesoraron mal al magistrado
Con el aval presidencial, el director de la AFIP, Ricardo Echegaray, puso en palabras la estrategia de la Casa Rosada de contestarle a la Corte Suprema, a la que consideran jugando un "rol político" en medio del calendario electoral.
Ésa es la mirada más extendida en el Gobierno sobre la conferencia de prensa que dio ayer Echegaray para responderle al presidente del máximo tribunal, que la semana pasada había denunciado públicamente que el kirchnerismo lo perseguía a través del organismo recaudador.En la mirada de Balcarce 50, el comunicado de la Corte, firmado por cinco de sus miembros, tiene una connotación política. Motivada por ese criterio, la presidenta Cristina Kirchner ordenó a Echegaray que desestimara la denuncia.
Según la visión de la Casa Rosada, aquel pronunciamiento fue "un error político" del máximo tribunal, al que ve actuar con una intención electoral después del fallo que determinó la inconstitucionalidad de la ley de reforma del Consejo de la Magistratura, que preveía la elección de los miembros de ese organismo que elige y destituye a los jueces mediante el voto popular.
"La Corte se equivoca en el comunicado porque sienta una posición ante un supuesto", se quejó una fuente oficial a LA NACION para explicar la estrategia detrás de las palabras de Echegaray. Según la versión del Gobierno, el presidente del máximo tribunal, Ricardo Lorenzetti, que denunció que lo perseguía la AFIP, actuó con "prejuzgamiento" sobre una sospecha. "El hecho que denunció no existe. Lo que hubo, como en muchos casos, fue un procedimiento de fiscalización, no de investigación", se defendieron en Balcarce 50.
Lo que molestó a la Presidenta fue la amenaza de denuncia judicial que había dejado trascender Lorenzetti a través de los medios, cuando tras dar a conocer que la AFIP lo estaba investigando evaluó hacer una presentación penal contra Echegaray.
Según describieron desde Balcarce 50, no había entre el titular del órgano recaudador y Lorenzetti una enemistad, sino todo lo contrario. "Varias veces se habían reunido y tenían un trato cordial", recordó una fuente de la Casa Rosada.
La Presidenta cree que Lorenzetti está jugando un rol político en medio de la campaña electoral. Ya lo reprochó en público, cuando tras el fallo que hizo caer el núcleo central de la ley de reforma judicial chicaneó que en 2015 ella quería convertirse en jueza. Lo dijo en el acto por el Día de la Bandera, en Rosario, y lo repitió el sábado pasado, en el lanzamiento de los candidatos que competirán en las próximas elecciones legislativas por el Frente para la Victoria, que tuvo a Cristina Kirchner como única oradora. "La sospecha que tenemos es que Lorenzetti fue mal asesorado y manipulado por algún interés político", insisten en el Gobierno para describir el momento de la denuncia del titular de la Corte.
La estrategia de la Presidenta será redoblar la apuesta en el tema judicial después del revés que significó la sentencia de la Corte. En este caso en particular, Cristina Kirchner esperó el regreso de Echegaray de un viaje a Bélgica para responder.
Y no fue casual. Preparado con filminas e información que distribuyó a los medios, el director de la AFIP buscó, según la versión oficial, contrastar las denuncias de la Corte.
Para eso, Echegaray minimizó el hecho de que se estuviera investigando a Lorenzetti y planteó que se trató de un procedimiento de rutina. Además, se victimizó al advertir que la Corte no le daba "seguridad jurídica" al Gobierno..
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