lunes, 11 de junio de 2012

En off

La escuela no era el fuerte de los hijos de Cristina

La trastienda de la política (y de los políticos)
La Presidenta, locuaz, habló de todo durante el brindis por el Día del Periodista con los cronistas acreditados en la Casa Rosada. De todo, menos de política y del Gobierno. Mientras en la ciudad crecía un cacerolazo de protesta, Cristina Kirchner relató que su hija, Florencia Kirchner quedó libre en el colegio en 2008 y debió dar todas las materias en diciembre. Señaló que quedó muy afectada por la crisis del campo y la situación de tensión que debieron afrontar sus padres. Dijo que eso la distrajo durante el año, pero que su recuperación en diciembre fue asombrosa. También recordó que Máximo Kirchner, su hijo, sacó un "insuficiente" en educación física, ya hace muchos años, en el secundario. Y que cuando ella, que era legisladora, fue a consultar al profesor, éste le explicó que era porque no sabía hacer la vertical. Cristina Kirchner le dijo que Máximo no sabía hacer la vertical porque sus padres, en su casa, no la hacían, sino que se dedicaban a actividades más intelectuales. Y que debía ser más contemplativo. Aclaró que Máximo es un entusiasta jugador de fútbol, que sufría los rigores de su padre, al que le gustaba poner pierna fuerte en la cancha de Olivos en los picaditos que convocaba para los viernes. Los periodistas querían preguntar sobre asuntos públicos candentes en ese momento, pero ella se disculpó y se fue.

La sintonía de Randazzo y Abal con la Presidenta

Además de las intimidades familiares, el brindis con Cristina Kirchner por el Día del Periodista sirvió, por lo menos, para conocer cómo está la relación de cada ministro con la Presidenta. El recientemente premiado Florencio Randazzo, que desde el miércoles pasado está a cargo del área de Interior y Transporte, se mostró suelto ante la jefa del Estado. Exultante por su nuevo cargo, le hizo chistes a Cristina, como pedirle que le recordara qué crisis había pasado el Gobierno en 2008 mientras la Presidenta se quejaba de aquella eterna pelea con el campo y el efecto que había tenido en su hija Florencia. Ella lo miró con una sonrisa apenas detectó la broma. Otro que se movió muy suelto ese día junto a la Presidenta fue el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina. Estaba de camisa sin saco, y mientras Cristina le ordenaba que presentara una denuncia por las agresiones sufridas por periodistas de la agencia estatal de noticias Télam, que depende de él, el ministro coordinador seguía igual devorando los canapés de queso blanco y nuez. Eso sí, cuando pretendía que la jefa del Estado le prestara atención, directamente la tomaba del brazo, dejando traslucir un trato casi familiar, de mucha confianza, como la que tenía con el ex presidente Néstor Kirchner.

Das Neves busca ahora un lugar con Scioli

Alejado de la vidriera política luego del fracaso electoral de 2011, el ex gobernador de Chubut Mario Das Neves está muy lejos de abandonar la política. Y muy cerca de dar una sorpresa. El viernes, a las 20, uno de los pocos empleados que quedaban en el Senado de la Nación vio a Das Neves ingresar al despacho de la legisladora chubutense Graciela Di Perna. Nada extraño, salvo porque en esa oficina lo esperaba el senador bonaerense Baldomero "Cacho" Alvarez de Olivera, referente de la agrupación La Juan Domingo, con la que Scioli reconstruye lazos con el peronismo provincial y nacional, pensando en 2015. Charlaron durante una hora, cuando los pasillos legislativos desiertos garantizan la falta de testigos indiscretos. O casi.

Rudy Ulloa Igor, otro pingüino que se aleja

No sólo Julio De Vido siente que Cristina Kirchner se alejó de los postulados económicos y políticos del fallecido Néstor Kirchner después de perder el área de Transporte, que esta semana pasó a manos de Florencio Randazzo. También un empinado miembro de la denominada "pingüinera", como el empresario y ex chofer de Kirchner, Rudy Ulloa Igor, tomó distancia de la Presidenta porque ella no lo consulta ni lo considera como hacía el ex presidente. Ulloa conserva relación con Máximo Kirchner, el hijo de la jefa del Estado, con quien suele verse seguido en Río Gallegos. "De Vido y Rudy Ulloa son como la familia de la doctora, pero ella se apoya hoy en otros sectores", explican en ese sector. Comparten la opinión de que la Presidenta se alejó del modelo tal como lo concebía su propio esposo.

El gobernador Peralta, en busca de auxilio minero

Se sabe que el gobernador de Santa Cruz, Daniel Peralta, no pasa por su mejor momento, ni en su relación con la Casa Rosada ni en el control de las variables económicas de su gestión provincial. Tanto es así que debió recurrir a un llamado reservado para lograr pagar sus compromisos: las empresas mineras que trabajan en la provincia. El pedido -cuentan en la tierra chica de los Kirchner- alcanzó a la módica suma de 14 millones de pesos y la respuesta habría sido. negativa, lo que sumó algo más de preocupación en el mandatario provincial, acostumbrado a hacer equilibrio entre la gestión y la sombra de Máximo Kirchner.

El inflexible cronómetro de Mauricio Macri

Los flamantes asistentes a las reuniones de los martes, esas en las que el jefe de gobierno invita a diputados y dirigentes nacionales a compartir su visión de la marcha de la gestión macrista, no lo podían terminar de creer. "A vos, que venís salteado, te doy cinco minutos. A vos, que venís siempre, un minuto", exclamó Mauricio Macri, en una de las últimas reuniones, cronómetro en mano y mirando, de manera alternativa, a un legislador y a un ministro

No hay comentarios:

Publicar un comentario