la ucr se prepara para 2013
Un foro radical con explícitas metas políticas
Rogelio Alaniz
Si el objetivo fue demostrar que el radicalismo sigue siendo un partido nacional con representación en todo el territorio, la tarea se cumplió con creces. En el foro convocado por las máximas autoridades nacionales de la UCR en la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA, estuvieron presentes desde el intendente de Ushuaia hasta los concejales y legisladores de Jujuy y desde los dirigentes de Mendoza a los militantes de Entre Ríos. También estuvieron presentes los intendentes radicales, entre los que mereció destacarse la presencia del de nuestra ciudad, José Corral.
El foro tuvo como objetivo demostrarle a la sociedad que la UCR no sólo goza de buena salud, sino que está en condiciones de ser el partido convocante para constituirse en una alternativa opositora en defensa de las instituciones de la República, amenazadas por lo que se calificó con insistencia por “un populismo autoritario”. El llamado del presidente del partido, Mario Barletta, a una multisectorial en defensa de la democracia y la Constitución Nacional amenazada por una reforma destinada a perpetuar el poder, fue una de las conclusiones más interesantes de este foro.
El acto se inició con un panel donde hicieron uso de la palabra los titulares de las bancadas parlamentarias, Ricardo Gil Lavedra y Luis Naidenof, además de los representantes del mundo del trabajo, la juventud y Franja Morada, la agrupación estudiantil de los radicales. Clausuró este tramo del foro, el presidente de la UCR, ingeniero Mario Barletta, quien insistió en la necesidad de hacer realidad la consigna de una Argentina con valores. Por su arte, Gil Lavedra y Naidenof insistieron en la necesidad de ejercer una intensa labor opositora que no excluya el compromiso de apoyar aquello que se considera importante para la sociedad, más allá de los avatares de las coyunturas. “Está bien estar lejos del gobierno dijo Naidenof-, pero muchas veces estar lejos del gobierno no significa estar cerca de la sociedad”.
Acto seguido subieron al estrado la socióloga Liliana de Riz y el historiador Luis Alberto Romero. Para los observadores, no dejó de llamar la atención que en una reunión interna del centenario partido, hagan uso de la palabra dos intelectuales sin filiación partidaria. De Riz habló acerca del rol histórico de la UCR, su vocación republicana y su compromiso con las convicciones. “Este país sería mucho más pobre si no existiera un partido como la UCR”.
Los reconocimientos al radicalismo se contrapuntearon con observaciones y críticas. “Los radicales -dijo- deberían aprender a hablar más en nombre del partido que en nombre propio”. También hubo referencias a un partido que sabe muy bien de dónde viene, pero ahora debe definir con más precisión adónde quiere ir. En su intervención abundaron las críticas al populismo y a su encarnación real en la Argentina, el actual gobierno nacional.
Romero, por su parte, se refirió a un tema que desde hace tiempo viene desarrollando en diferentes intervenciones: el Estado o la crisis del Estado. Luego de un breve repaso conceptual acerca de los atributos de un orden estatal, señaló que en la Argentina, el Estado se ha debilitado en aquellas funciones destinadas al control y la planificación de estrategias a mediano y largo plazo, mientras que lo que se ha fortalecido es el gobierno. La distinción entre Estado y gobierno le permitió señalar a modo de conclusión que con los Kirchner “no se está reconstruyendo el Estado, sino engordando al gobierno.
Durante las primeras horas de la tarde, los presentes sesionaron en las diversas comisiones que se constituyeron. También en este punto hubo novedades dignas de destacar. En primer lugar, el funcionamiento abierto en comisiones para discutir los diversos temas de la agenda nacional. En segundo lugar, la participación en las comisiones de dirigentes y afiliados en un plano de absoluta igualdad. A título de humorada, podría decirse que el clásico uniforme de traje y corbata, tan típico de los radicales en estas reuniones, ha sido desplazado por la campera, la camisa o el pulóver. En el acto de clausura, por ejemplo, donde hablaron las máximas autoridades del partido, ninguno exhibía corbata. El dato es algo más que una ligera y frívola referencia a la moda.
Concluido el trabajo en comisiones, se realizó un plenario donde se dieron a conocer las conclusiones a las que se arribaron. Acto seguido subieron al estrado Mario Barletta, Ricardo Alfonsín, Ernesto Sanz, Julio Cobos, Alicia Mastandrea y el actual intendente de la localidad de Ushuaia en representación del foro de intendentes radicales.
Cada orador puso el acento en algunas de las tareas que debe proponerse la UCR hacia el futuro para constituirse en alternativa opositora en su doble cometido: controlar al poder y ser opción electoral. Alicia Mastandrea reivindicó el rol de la mujer en la historia de la UCR y reclamó para las mujeres paridad en la representación partidaria y política. Sanz enfatizó la crítica al populismo autoritario y la importancia de la lucha ideológica que deben proponerse los radicales. Cobos, por su parte, puso énfasis en las tareas de gestión, mientras que Alfonsín se refirió a los objetivos que debe proponerse el partido para cumplir con sus metas políticas. Por último, el ingeniero Barletta convocó a la unidad de los radicales, porque “la sociedad necesita del radicalismo”. Advirtió, por último, acerca de “quienes trabajan para dividirnos”. El Foro culminó con los consabidos aplausos, mientras las estrofas de la Marcha Radical poblaban el salón auditorio de la Facultad de Ciencias Económicas.
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