convencion nacional trunca
La UCR fracasó en el intento de reforma y profundizó la interna
Tras el cruce de insultos, el encuentro radical se quedó sin quórum. La discusión ahora será por la presidencia del partido.
“Papelón”, “bochorno”, “escándalo” y “patético”, fueron algunas de las calificaciones que más se escucharon ayer para describir el resultado de la Convención Nacional de la Unión Cívica Radical del viernes, que no sólo no dio lugar al debate profundo que se esperaba, sino que terminó con insultos cruzados y revoleo de botellas. Como si fuera poco, el único punto que tenía consenso, que era el de votar la necesidad de reforma de la Carta Orgánica, para que se inicie un debate al respecto, no fue votado, ya que la reunión se quedó sin quórum alrededor de las 3 de la madrugada.
Así, el radicalismo se concentrará ahora en la disputa por la sucesión de Ernesto Sanz al frente del Comité Nacional, decisión que se deberá tomar el 16 de diciembre. En esa discusión, el candidato que asoma con más posibilidades es el intendente saliente de Santa Fe, Mario Barletta, quien podría convertirse en el candidato de consenso. Ayer, Barletta se reunió y recibió el apoyo de la agrupación juvenil Cantera Popular, que fue una de las que mayor dureza mostró contra la actual conducción partidaria en la Convención.
Ayer, Julio Cobos envió un comunicado en el que pide un “cambio”. “Implica cambiar formas y cambiar personas; siempre con el objetivo de mejorar. Una nueva autoridad partidaria debe ir acompañada de nuevas autoridades en los bloques y Cámaras”, afirmó. Igualmente aseguró: “Todos somos responsables de la situación actual, todos somos responsables de encontrar las soluciones”.
El viernes, en el Centro Asturiano de Vicente López, cuando parecía que todo se calmaba, la polémica recrudeció. Cerca de la una de la madrugada, el diputado electo Eduardo Santín realizó una encendida defensa del discurso que horas antes había realizado Leopoldo Moreau, en el que había defendido muchas políticas del kirchnerismo que habían sido rechazadas por el radicalismo. Ricardo Alfonsín tomó el micrófono, por segunda vez en la jornada, para espetarle que “si hubiese puesto el mismo entusiasmo” en la campaña podrían haber conseguido algún diputado más. Además, el ex candidato presidencial hizo referencia a que gracias a la integración con Francisco de Narváez llegaron al Congreso diputados que ahora son críticos. Santín pertenece a la línea interna de Moreau, que en su momento apoyó el acuerdo con De Narváez.
Desde el otro bando, Cecilia Moreau, la hija del histórico dirigente, contestó insultando al propio Alfonsín. La respuesta quedó en boca de Juan Pedro Tunessi, quien le endilgó a Moreau que defendía al Gobierno nacional “por los más de cien contratos que mantiene en la Anses”.
Ya en ese momento, gran parte de los delegados había decidido retirarse de la Convención, ante la imposibilidad de tener un debate serio y que no estuviera cargado de hipocresías. Finalmente, ya sin quórum se levantó la sesión.
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