domingo, 22 de diciembre de 2013

cristina, en El Calafate, con una meta corta: “superar” el 24 de diciembre

cristina, en El Calafate, con una meta corta: “superar” el 24 de diciembre

POR LUCÍA SALINAS

Dejó instrucciones para asegurarse que no haya disturbios antes de esa fecha, punto de inflexión en un mes de alta conflictividad.




Acto. La Presidenta, en su última aparición, en la Casa Rosada./ARCHIVO

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22/12/13
La presidenta Cristina Kirchner descansa desde el viernes en El Calafate. Dejó expresas directivas al jefe de Gabinete Jorge Capitanich y al ministro de Economía Axel Kiciloff antes de partir al Sur.
La meta es superar el 24 de diciembre.
El Gobierno espera transitar la Navidad sin disturbios y como un punto de inflexión ante el mes de tensión social que se vivió. “De ahí en más, si se supera sin incidentes el mes, quedan meses más tranquilos hasta que en marzo retome de lleno la actividad la Presidenta”, contó un alto funcionario.
Cristina ya está nuevamente a Santa Cruz donde pasará las Fiestas entre Río Gallegos y El Calafate. Aprovechará el viaje para tomarse unos días más de descanso. En la Casa Rosada estiman qu e entre el 10 y 15 de enero retomará la jefa de Estado a las funciones, pero aún con ritmo de baja intensidad. “Hay algunos viajes al exterior en esa fecha, pero los médicos recomiendan que no se exponga a un ritmo que pueda generarle estrés nuevamente”, indicó una fuente oficial. Desde que volvió del sur el fin de semana pasado, la actividad de la Presidenta se redujo a unas pocas audiencias en la Quinta de Olivos y encabezó dos actos en la Casa Rosada donde no pronunció ningún discurso.
Su última aparición pública donde habló sobre los acontecimientos actuales: el reclamo policial, la ola de saqueos, fue el día de los 30 años de Democracia con una dura crítica a los efectivos a quienes calificó de “extorsivos”. “El discurso fue firme, y también entendió que la gente no quiere más discursos confrontativos”, indicó un integrante del Gabinete opinando sobre el cambio discursivo de la Presidenta y su poca exposición pública.
Los meses siguientes continuarán con actividad en Olivos y paulatinamente –con un riguroso seguimiento médico– retomará el ritmo diario de trabajo desde la Casa Rosada. “Se asustó realmente, entendió que debía priorizar su salud y que no podía mantener el ritmo que venía teniendo”. “Continúa respetando todas las indicaciones médicas de pocas audiencias y que no superen la hora”, señaló otro funcionario. Nunca ajena a los acontecimientos de la coyuntura, Cristina monitorea todo desde la quinta Presidencial, dando desde allí las directivas.
La administración diaria continúa sobre los hombres de Jorge Capitanich a quien se le abrieron algunos frentes internos. El principal es el de Carlos Zannini a quien muchos observan en un segundo plano ante la autonomía del jefe de Gabinete. “Es un tiempo de mayor protagonismo del PJ y de Capitanich y menos de La Cámpora y Zannini”. “El día de las elecciones estaba celebrando que en Santa Cruz ganó cuando no obtuvimos los votos esperados”, contó un integrante del Gabinete.

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