sarkozy esta en el horno

Sarkozy acorta distancias, pero Hollande se mantiene como favorito
Para el ballottage, los sondeos le dan entre seis y ocho puntos de ventaja al candidato socialista

Cuando falta menos de una semana para el ballottage, tras las reñidas elecciones presidenciales, el mandatario Nicolas Sarkozy recorta distancias y François Hollande sigue siendo el gran favorito.
El sondeo de Ipsos para Le Monde reduce las distancias entre los dos candidatos desde los ocho puntos hasta los seis: 53% a 47%. Y la encuesta diaria de IFOP también registra un avance del presidente, aunque lo sitúa más lejos del triunfo: 54% a 46%. Aunque hay todavía un 20% de votantes que no quieren contar lo que van a votar o no lo han decidido, las previsiones indican que Sarkozy necesitará movilizar a los abstencionistas de la primera vuelta para coronar su improbable remontada.
Los detalles revelan todas las paradojas de esta campaña virulenta. El presidente logra arrastrar al mismo tiempo a numerosos seguidores de la ultraderechista Marine Le Pen y del centrista François Bayrou, pero ese esfuerzo implica que su margen de mejora es limitado. Sarkozy repite cada día que los sondeos se equivocan y que una gran movilización popular dará la vuelta a los pronósticos. De momento, no parece que los abstencionistas estén muy dispuestos a sumarse a la fiesta: el 82% de los consultados se dice seguro de votar el domingo, frente al 83% que lo afirmaba antes de la primera vuelta, cuando la participación fue del 79,5%.
La reciente mejoría de Sarkozy, según Ipsos, se debe además a causas inesperadas: el descenso de la fidelidad a Hollande entre los votantes de Jean-Luc Mélenchon (el 80% declara que votará al socialista frente al 86% que tenía esa intención el 22 de abril), y el acercamiento de los electores del centrista Bayrou a Sarkozy: el 40% dice que le dará su voto frente al 32% que planeaba hacerlo hace diez días.
Curiosamente, el electorado de Le Pen parece creer poco en la sinceridad del viraje estratégico del presidente, que ha abrazado las tesis de la ultraderecha respecto a las fronteras, el proteccionismo, el antieuropeísmo, la identidad nacional, los derechos de las minorías y la exaltación de la patria. Su actitud está en sintonía con los comentarios despectivos de la líder del Frente Nacional hacia el cortejo de sus electores. Le Pen dará una indicación de voto a sus 6,4 millones de votantes hoy durante su tradicional homenaje a Juana de Arco del Primero de Mayo. Todo hace pensar que optará por sugerir el voto en blanco o dar libertad, ya que si Sarkozy pierde su horizonte político se abrirá con la probable crisis de la derecha gaullista.
El número de lepenistas que piensa apoyar Sarkozy ha bajado según IPSOS del 60% al 54%, y eso explica que el presidente siga muy por detrás de Hollande, quien a su vez pasa del 18% al 14%. Mientras tanto, los que planean abstenerse o votar en blanco crecen con fuerza: del 22% al 32%. Si esa tendencia se mantiene, la reelección de Sarkozy sería imposible.
El exjefe del Estado se mueve en terreno minado. Su lepenización ha generado malestar en casi la mitad de la población, según otra encuesta publicada el lunes por el diario La Croix. El 49% cree que se ha colocado "demasiado a la derecha", frente al 44% que piensa que va en la dirección justa. Y si 64% de los votantes de Le Pen ve bien la galopada, el 60% de los seguidores de Bayrou lo deplora.
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