¿Campaña en la costa o relax en sus provincias? Conozca qué será de las vacaciones de los dirigentes políticos ahora que el Congreso entró en el receso estival.
Si bien el Congreso deja de funcionar durante el verano, la actividad política de los legisladores no se detiene. En muchos casos, lejos de dedicarse al relax, los parlamentarios aprovecharán los principales centros turísticos para hacer campaña de cara a los comicios. Así lo dicta el manual de estilo: la maquinaria publicitaria de los candidatos debe ponerse en marcha ni bien arranca el año electoral. Y 2011 no será la excepción a la regla.
Desde la oposición son varios los que saldrán a la ruta en búsqueda de potenciales votantes. La Coalición Cívica, espacio que lidera la diputada y otra vez aspirante a presidente, Elisa Carrió, ya tiene el itinerario armado para promocionarse durante todo enero. Su recorrido veraniego arranca desde la primera semana del año, pero todas las fichas están puestas en el viernes 14 de enero, cuando “Lilita” pise fuerte en Mar del Plata para realizar un acto de lanzamiento junto a su compañero de formula, el diputado Adrián Pérez.
Por su parte, Pérez recibió el 2011 en Chile, junto a la familia de su mujer, donde aprovechó para descansar antes de encarar con una agenda más que cargada: se presentará en la ciudad de La Plata, después en Capital y cerrará la primera semana del año recorriendo Villa Gesell y Pinamar. Durante la segunda quincena de enero, realizará una gira en soledad por diferentes puntos del país, mientras que estará acompañado por Carrió en Córdoba, destino predilecto por su gran concentración de votantes.
En los diferentes actos, el cuadro de los “lilitos” se completará con la presencia de la senadora María Eugenia Estenssoro, con aspiraciones a jefa de la ciudad; de Juan Carlos Morán, candidato a gobernador bonaerense, y de Carlos Comi, quien disputará la gobernación por Santa Fe. Además de las localidades costeras, el tour de la CC encarará hacia el interior, incluyendo paradas en el sur del país.
Desde mediados de diciembre, quien arrancó temprano su campaña desde la costa, fue la lider del GEN, Margarita Stolbizer. En esa oportunidad, acompañada de dirigentes de Villa Gesell, Pinamar y Madariaga, inauguró "el GEN del Tuyú" e insistió con la necesidad de crear un Frente Progresista junto al radicalismo, el socialismo y otras fuerzas. Su socio, el senador Samuel Cabanchik (Probafe), advirtió que viajará a la costa con su familia, pero aclaró que cualquier viaje turístico puede convertirse en una actividad proselitista, sobretodo para amalgamar las alianzas con vistas a las elecciones en la ciudad.
Otro aliado del GEN, el diputado Ricardo Alfonsín, también sentará base en los balnearios, con vistas a posicionarse sobre sus competidores de la UCR. A la par, su compañera de bloque, Silvana Giudici, pasará unos días de enero en su casa de Villa Gesell. Allí, la secretaría legislativa del bloque radical en Diputados va a buscar desenchufarse pero, por las dudas, tendrá a mano el teléfono personal de todos sus correligionarios ante cualquier urgencia de índole política.
Asimismo, el diputado radical Juan Casañas no sabía con precisión qué sitio elegiría para descansar, aunque sí estaba seguro de que sería una ciudad balnearia más allá de la ruta 2. Sucede que nadie quiere perderse un lugar en la costa atlántica: hasta la diputada Cynthia Hotton planea presentar su partido “Valores para mi País” en suelo marplatense.
En cambio, varios boinas blancas prefieren vacacionar en otros pagos, lejos del asedio de los fotógrafos de guardia en los clásicos centros turísticos. El vicepresidente Julio Cobos, candidato a la primera magistratura, se irá de vacaciones con su familia a Brasil, por la zona de Florianópolis, donde también apostará su sombrilla el diputado Atilio Benedetti. Fronteras adentro, por las tierras del buen vino, paseará el flamante titular del bloque de la UCR en la Cámara de Diputados, Ricardo Gil Lavedra, quien visitará en pose “summer time” el majestuoso Cerro Tronador.
En cuanto al Peronismo Federal, el diputado Francisco De Narvaez, recordado por la costosa campaña con la que triunfó en las últimas elecciones legislativas, no se tomará vacaciones y se dedicará de lleno a su candidatura a gobernador bonaerense. Según confirmaron desde su entorno, el ex aliado de Mauricio Macri, visitará durante enero y febrero toda la provincia aunque ocupará el “80% del tiempo” recorriendo el conurbano, haciendo propaganda entre “los que no se pueden ir de vacaciones”.
De todas formas, no dejará de lado las localidades de la costa, partiendo desde la exclusividad de los balnearios de Cariló. Es sabido que el “Colo” no escatima ningún gasto en campaña: muchos recuerdan los mazos de cartas -con su nombre en el reverso- que sus promotoras repartían años atrás en la tradicional playa Bristol. En tanto, los diputados de su espacio, Gustavo Ferrari y Natalia Gambaro, realizarán acciones de campaña en sus lugares de origen.
En la vereda de enfrente, siempre gasolero en cuanto a la inversión publicitaria, el diputado Fernando “Pino” Solanas se sumará a la oleada de políticos que andarán de recorrido por la costa atlántica. Aunque no pretende actos fastuosos sino pequeñas convocatorias de armado político, su agenda playera lo llevará a Villa Gesell, para reunirse con los miembros de la asamblea en defensa de los médanos, y a Mar del Plata, al frente de la Junta Promotora de su partido en la “Feliz”.
“Pino no para nunca”, aclaran sus voceros al referir que durante enero el candidato a presidente de Proyecto Sur también avanzará en la edición de su última película, titulada “Oro negro”. Luego de un ajetreado año parlamentario, el mes de enero es el único momento que Pino puede dedicarle al séptimo arte, antes de arrancar a tiempo completo su campaña electoral. Su idea es presentar la secuela del film “Tierra Sublevada” en abril en los festivales de Cannes y Venecia, donde han tenido buena recepción sus producciones. En cambio, recién llegará al público argentino en junio, luego de algunos retoques de sonido que se realizarían en Francia.
Otro integrante del interbloque Proyecto Sur, el diputado Miguel Bonasso, saldrá al ruedo durante la segunda quincena de enero pero no con intenciones partidarias, sino con el objetivo de propagar su último libro, “La venganza de los patriotas”, en las principales ciudades costeras. Tras la cumbre climática en Cancún, el periodista se quedó en México a pasar las fiestas con su familia y regresará al país para continuar con la presentación de su nuevo thriller.
El líder de Nuevo Encuentro, Martín Sabbatella también pasó las fiestas en el exterior. Al igual que en años anteriores, el moronense eligió “playas cercanas” a la ciudad uruguaya de Montevideo, a la espera de lo que será una campaña exigente en el territorio que hoy comanda Daniel Scioli.
Más lejos aún fue la senadora salteña Sonia Escudero, quien viajó a Australia, junto a su esposo Kenneth Reed, para visitar a su familia. La peronista federal sí dedicará unos días al descanso, tras haber tenido un año movido al frente de la comisión de Justicia y Asuntos Penales de la Cámara alta. Además sus allegados aseguran que, en Salta, “no competirá en las elecciones provinciales previstas para el próximo 10 de abril”, lo que supone otra razón para un verano light.
Mientras, en el oficialismo, señalan que no hay tiempo que perder. Como es el caso del titular del bloque del FpV en la Cámara baja, Agustín Rossi. Presionado por el calendario electoral de Santa Fe -el 22 de mayo se realizarán las elecciones internas-, su agenda estará dividida entre el armado de listas y la participación en actividades del gobierno nacional vinculadas con la provincia.
Por la misma razón, el senador socialista Rubén Giustiniani no tendrá demasiado descanso en su Santa Fe natal. A partir de mediados de enero, encabezará recorridas barriales e institucionales para ir preparando el terreno de cara al 5 de febrero, cuando presente su candidatura a gobernador al frente de un plenario de militantes y dirigentes partidarios. Tras la postulación del senador, las divisiones en el PS estarán a la orden del día.
Con este panorama, durante el receso estival en el Congreso, habrá quienes lucirán bronceados tras caminar la costa y quienes se tendrán que resignar a un verano sin chapuzón alguno, pero con una actividad proselitista como para no pegar un ojo. Lo cierto es que 2011 es un año electoral: aún con 40 grados de calor a la sombra, la rosca política no deja nunca de rodar.
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