Magnetto, Lijo y la oposición celebraron el 4 de Julio en la Embajada de EEUU
Políticos, empresarios, jueces y artistas asistieron al brindis por la independencia de Estados Unidos. Galería de imágenes.
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Parecía la pesadilla de un kirchnerista. El juez Ariel Lijo, el CEO de Clarín, Héctor Magnetto, representantes del campo, empresarios y dirigentes del arco opositor, todos juntos bajo el mismo techo. Pero no se trataba de un sueño, ni de nada parecido: era el brindis de la embajada de Estados Unidos en Buenos Aires.
Con motivo del 4 de Julio, celebración de la independencia norteamericana, el encargado de negocios de la Embajada, Kevin Sullivan, convocó al lunch en el Palacio Bosch, donde reside, en el barrio porteño de Palermo.
El encuentro reunió a las personas que más obsesionan al oficialismo: Lijo encabeza la Causa Ciccone, por la que procesó al vicepresidente Amado Boudou y Magnetto dirige el grupo mediático enfrentado al Gobierno desde hace seis años.
También asistieron representantes del gobierno bonaerense de Daniel Scioli (Alberto Granados, ministro de Seguridad provincial, y Gustavo Ferrari, asesor general bonaerense), de la industria (Héctor Méndez, titular de la Unión Industrial), empresarios (Jorge Brito, del Banco Macro), y dueños de medios de comunicación (Daniel Hadad, de Infobae; Daniel Vila, deAmérica, y Sergio Spolzski, de Veintitrés).
Además, estuvieron Federico Pinedo, presidente del bloque PRO en Diputados; el expresidente Fernando de la Rúa; el ministro de Seguridad porteño, Guillermo Montenegro; los intendentes massistas Mario Meoni (Junín) y Gustavo Posse (San Isidro), y el presidente del Banco Ciudad, Rogelio Frigerio. También hubo figuras del ambiente artístico: Mirtha Legrand, Marcela Tinayre, María Kodama y Maru Botana.
Sullivan afirmó que desde Washington observan que en Argentina "se abrió un panorama mucho más favorable para las inversiones" y que hay "una visión optimista" del futuro, por "muchos avances en temas de larga data, con una situación prometedora".
El diplomático también mencionó el conflicto judicial con los llamados "fondos buitre", la otra cuestión que obsesiona al gobierno de Cristina Fernández de Kirchner: "sólo falta eso, es un desafío, que no es fácil de resolver", comentó, según la agencia Télam.
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