Se trata de Ryutaro Nonomura, un político japonés de 47 años que demandó más de 3.000.000 de yenes -30.000 dólares- por gastos de viaje sin aportar ninguna factura, y que intentó justificarse en un acto dramático que se convirtió en viral y que es blanco de burlas en las redes sociales.
El político, elegido en 2011 para la asamblea de Hyogo, en el oeste de Japón, grita excusas incoherentes entre llantos desgarradores frente a toda la prensa que no podía creer lo que estaba sucediendo.
Según los medios locales, el funcionario gastó todo este dinero en 195 viajes a cuatro lugares en un año, de los que 106 fueron visitas al mismo complejo de aguas termales, sin presentar un recibo o un informe.
En la conferencia de prensa, que duró tres horas, dijo: "finalmente me convertí en un miembro de la asamblea... Con el único propósito de cambiar la sociedad... Este Japón... Quiero cambiar esta sociedad... Yo he apostado mi vida... ¿No lo entienden?".
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