Kirchner podría volverse más fuerte
Fernando MartínezMartes, 11 de octubre de 2011
Las alianzas entre partidos reducen los escenarios. Los imprevistos quedarán en manos de la clase media
El sondeo de opinión de OPSM reveló que aún casi la mitad (42,9%) del electorado no ha definido su voto
Las cartas parecen estar echadas en las elecciones generales argentinas. El próximo 23 de octubre además de definirse quien presidirá la Casa Rosada, se sabrá quienes serán los nuevos ocupantes del Congreso Nacional que determinarán una recomposición de las fuerzas políticas.
Un estudio realizado por la consultora Opinión Pública Servicios y Mercados (OPSM) que se hizo pública el 3 de octubre, refleja que la candidata y presidenta Cristina Fernández de Kirchner, de la Coalición Frente Por La Victoria (FPLV), se alzaría cómodamente con la victoria. La encuestadora asegura que Kirchner obtendría más del 50% de las preferencias lo que implicaría un avance con respecto a los resultados de las elecciones primarias del pasado 14 de agosto donde resultó vencedora.
Dicho estudio de opinión acota la posibilidad de que el margen de respaldo a la presidenta Cristina Fernández pudiese aumentar en diez puntos.
Gracias al electorado de la Provincia de Buenos Aires que representa el 38% del padrón electoral y en donde están facultados para votar más de 10 millones 800 mil personas.
La misma encuestadora publicada por el diario El Cronista refleja, sin embargo, una modificación en las preferencias hacia los otros candidatos. El ranking opositor se alteraría de forma importante con respecto a los resultados de las primarias.
Es así como el segundo lugar podría recaer en el candidato socialista del Frente Amplio Progresista (FAP), Hermes Binner, con un 13,9%, seguido del candidato del partido Unión para el Desarrollo Social (UDESO), Ricardo Alfonsín con un poco más del 10%.
Más atrás quedaría el candidato de la Alianza Compromiso Federal, Alberto Rodríguez Saá con un 8,5% quedando de quinto lugar el ex presidente y candidato por el Frente Popular, Eduardo Duhalde con apenas el 5,7% sólo superando en la intención de voto a la candidata Elisa Carrió de la Coalición Cívica al que le asignan un 3,5%.
Se recuerda que en las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias, del pasado mes de agosto en la Argentina, el candidato Alfonsín con un poco más del 12% de los votos se había hecho con el segundo lugar y posterior a éste, Duhalde en tercer lugar y Binner de cuarto.
Las diferencias en los resultados dependerán de los votos provinciales y el arraigo que puedan tener cada uno de los candidatos en los diferentes estratos sociales.
En las Primarias Abiertas, Simultaneas Y Obligatorias (PASO) del 14 de agosto de 2011 se presentaron 10 fórmulas presidenciales, de las cuales sólo 7 superaron el umbral obligatorio del 1,5% de los votos válidamente emitidos, de ahí su característica reductora.
Sin embargo, las primarias como indica Mariano Obarrio, del diario La Nación de Argentina, generaron un ambiente electoral atípico pues han disminuido la expectativa y el interés propio de estos procesos electorales.
Obarrio comenta que en las elecciones de 2007 fue amplia la propuesta política. Pues, pese a que la presidenta Cristina Fernández era la favorita según los sondeos, la rivalidad entre las campañas hacia pensar que cualquier modificación en las preferencias era factible.
"Las primarias han dado a los candidatos de la oposición una señal, una sensación de que Cristina Fernández ya ganó, que es imposible derrotarla y que no habrá mayor alteración", señaló Obarrio quien asegura que por la supremacía en la intención de votos de Fernández de Kirchner "muchos comienzan a dar su saltos hacia el partido oficial y negociar puestos o cargos".
APOYO Y TENDENCIAS El analista político argentino, Martín D’Alessandro, piensa que "los resultados de las primarias han sido abrumadores pero ese 50% que obtuvo Cristina es muy heterogéneo, y que ha tenido motivaciones diferentes: un voto consumista, otro clientelista, la buena recepción de algunas de las políticas públicas, la identificación con el peronismo y la lealtad al sello justicialista, la empatía con la muerte de Kirchner y con la viudez de Cristina, e incluso un voto resignado a causa de los errores de la oposición".
El experto asegura que la oposición deberá reforzar y mejorar su rol específico: señalar los errores, promover los controles para contener los abusos, repensar sus armados internos y redefinir sus mensajes hacia el electorado y sus estrategias electorales de cara al próximo turno.
Por su parte, Mariano Obarrio, mencionó la posibilidad de que dentro de las filas del partido de Eduardo Duhalde y de Rodríguez Saá se estén reacomodando las tendencias y que pueda concretarse al final un apoyo para la Coalición de Frente Por la Victoria debido a que son afines a la idea peronista.
"Binner podría consolidarse en un segundo lugar gracias a su cargo de gobernador de la Provincia de Santa Fe, una de las más importantes de la Argentina, podría agrupar el favoritismo regional y además no presenta tanto rechazo dentro de los afectos al oficialismo por compartir ideas similares en el orden social y económico", indicó.
Obarrio afirma que "Binner representa quizás una cara menos desgastada, un alternativa, con respecto a un Duhalde por ejemplo". Por otro lado, sobre la candidata Elisa Carrió expresó que "ella salió de las primarias muy desgastada, además que su discurso quedó desfasado".
"No creo que haya un cambio de tendencias, quizás las esperanzas radiquen en los sectores medios de la población por el temor que representa la acumulación de poder sobre una misma persona.
La clase media que representa de 10 a 20% de la población puede retraerse y votar en contra de Fernández para las legislativas", puntualizó.
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