la nueva estrella juvenil
Mayra Mendoza, la "capitana" de La Cámpora
Es la única mujer de la conducción de la agrupación y ex novia de José Ottavis. Creció en la Anses y hoy es diputada nacional.
Compromiso. Participa activamente de las acciones de La Cámpora, y es muy común verla portando mensajes. Cristina es para ella su modelo a seguir.
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Mayra Soledad Mendoza es hija de la democracia. Nació el 26 de noviembre de 1983 y creció en una familia radical de Quilmes. Lo conocido es su ascenso vertiginoso dentro del poder kirchnerista. Lo que quedó oculto por su ascendiente estrella política, es su pasado. Si fuera por ella ese pasado quedaría allí, enterrado. Ahora, lo que cuenta es que es una militante ultra kirchnerista que levanta banderas del peronismo de las que antes estaba muy lejos.
Mendoza es diputada nacional y la única mujer en la mesa chica de La Cámpora, que integran también Eduardo “Wado” De Pedro, Andrés “Cuervo” Larroque, Mariano Recalde y José Ottavis. En una estructura gobernada por hombres, es la única voz femenina que es escuchada.
Mendoza trabajó por primera vez en la política junto a un concejal quilmeño, Oscar Batallés, según relata el libro La Cámpora, historia secreta de los herederos de Néstor y Cristina. Más tarde se incorporó como asesora del senador José Eseverri, uno de los primeros radicales en incorporarse a la experiencia de Compromiso K. El armador principal de ese espacio era el correntino Roberto Porcaro, que es hoy uno de los consejeros de mayor confianza de Cristina.
Corría el año 2005 y Mendoza conoció allí a José Ottavis, hoy vicepresidente de la Cámara de Diputados. En ese entonces, referente de la JP de la provincia de Buenos Aires, y discípulo de Porcaro. Mendoza pasó a ser la secretaria de Porcaro y empezó su ascenso dentro del verdadero poder.
En esa misma época Mendoza trabajó, según registros de la Anses, en el Hipódromo de Palermo. Por un año, de 2006 a 2007, estuvo en la Municipalidad de Zárate hasta que recaló en su primer puesto importante. En septiembre de 2009, con Diego Bossio en la Anses, Mayra Mendoza se convirtió en gerenta de Relaciones Institucionales de uno de los organismos con mayor presupuesto dentro del Gobierno nacional. Muchos de sus compañeros de La Cámpora se fueron convirtiendo en esa época en delegados de Anses, para aprovechar los recursos de la entidad previsional y posicionarse políticamente donde antes no tenían armado político.
Mendoza fue hasta hace poco y durante muchos años, la novia de Ottavis. Intentaron con terapia de pareja pero el asunto fracasó. Ella asumió en diciembre en su banca de diputada nacional por la provincia de Buenos Aires y él como legislador provincial. Las dos veces que Cristina asistió al Congreso, ella era su alumna más aplicada: anotaba en un papel cada frase que decía CFK. Al igual que otros miembros de la conducción camporista ha aprovechado las mieles del poder. Según relata el libro La Cámpora, compartió con un Ottavis un viaje a París donde recibió como regalo joyas de Swarovski.
Ahora es una fundamentalista del proyecto: “‘Tal vez me cueste más por ser mujer… pero creo tener la fuerza para poder hacerlo’, nos dijo en su discurso de asunción. Y sí, la Presidenta Coraje hizo mucho y más, pese a los grandes golpes padecidos y a las tantas piedras que han puesto en el camino, continuó y profundizó el modelo y la transformación. Ella se animó en estos años a lo que nadie se había imaginado, a lo que muchos Presidentes, nunca se atrevieron ni a pensar”.
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