El entorno de Schoklender, con una espectacular suba en el patrimonio
Por Nicolás Pizzi
Autos de lujo, varias propiedades y viajes de 50.000 pesos, entre los hallazgos del fiscal del caso.
VISTA ÚNICA. EL HOTEL LAS HAYAS, FRENTE AL CANAL DE BEAGLE. ALLÍ PASARON SUS VACACIONES SERGIO SCHOKLENDER Y SU FAMILIA EN JUNIO DE 2011.
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- 24/12/11
El “festival de gastos” que se dio en torno a los hermanos Sergio y Pablo Schoklender sigue aportando detalles escandalosos . Viajes de lujo, autos importados y propiedades a granel aparecen también en el patrimonio de la ex mujer de Schoklender, Viviana Sala, y en la familia de su socio y mano derecha, Alejandro Gotkin. Ambos figuran en el listado de indagatorias que pedirá el fiscal federal Jorge Di Lello el próximo martes.Para los investigadores, son dos protagonistas principales de la maniobra de defraudación y lavado de dinero con los fondos públicos destinados a la Fundación Madres de Plaza de Mayo.
Vacaciones en familia En julio del año pasado, Sergio Schoklender aprovechó el receso escolar de invierno para viajar a Ushuaia junto a su hijo y su ex mujer. También invitó a su piloto, Gustavo Serventich, a sus dos hijos, a su esposa, Carolina Gentile, y a los dos hijos de ella. Durante una semana se hospedaron en el hotel Las Hayas Resort, que ofrece una vista espectacular de la Bahía del Canal Beagle. Ocuparon cinco habitaciones : dos suites de lujo y tres standard.
Solo por alojamiento, gastaron $ 44.409 . Para intentar disimular, la cuenta se puso a nombre de Trade Travel Company S.A., la financiera ubicada a una cuadra de la Fundación donde los Schoklender y su entorno solían cambiar cheques. De su bolsillo, Sergio abonó otros $ 13.257, correspondiente a los gastos de hospedaje. Un total de $ 57.666 por una semana de descanso.
No era la primera vez. Schoklender ya había visitado ese lugar en octubre de 2009. También ese año se hospedó en un hotel de lujo de Bariloche.
Más que una sociedad conyugal Las inversiones inmobiliarias de Viviana Sala sorprendieron hasta los propios investigadores. En los últimos tres años, invirtió al menos US$ 175.000 y $ 480.000 según surge del informe que hizo el fiscal Raúl Pleé.
La última compra la hizo a nombre de Vicasa, la sociedad que fundó junto a la mujer del piloto de Schoklender. La casa donde vive actualmente junto a su ex esposo y el hijo de ambos, en Guevara al 1400, la compró en tres etapas. En 2007 adquirió la unidad 3, de 113 m2. En enero del año siguiente sumó la unidad 1, de 134,47 m2. Y en mayo de ese año completó la operación y anexó la unidad 2, de similares proporciones. Curiosamente, cuando la pareja se divorció legalmente, a fines de 2008, las tres propiedades quedaron a su nombre .
También en 2008, la psiquiatra compró un lote de 1.250 m2 en el barrio El Patacón, donde solía reunirse el círculo íntimo de los hermanos Schoklender.
Al año siguiente, siguió invirtiendo en el mismos rubro. Compró otro terreno en el mismo barrio cerrado, en Pilar, y dos lotes en la localidad de Derqui, de 300 m2 cada uno. En el informe que hizo el fiscal Antilavado no figura el monto que se pagó por esas dos últimas operaciones, realizadas por la escribana Matilde S. Muratti. Sí consta que Sala trabaja desde 2008 para el Gobierno de la Ciudad en el área de Salud Mental del hospital Marie Curie.
Su último sueldo es de $ 9.076 , aunque también presente aportes como autónoma.
Los bienes del contador y su familia El caso de Alejandro Gotkin es paradigmático. En los últimos años, sumó propiedades y autos a su patrimonio de manera indiscriminada . Al mismo ritmo, creó decenas de sociedades junto a familiares y amigos. El contador se convirtió en la mano derecha del ex apoderado, y llegó a manejar al mismo tiempo la Fundación y la constructora Meldorek. Cuando estalló el escándalo, hizo un culto del bajo perfil.
¿Qué pruebas lo complican? Las pericias contables lo ubican a la cabeza de las maniobras para captar dinero de la Fundación y depositarlo en cuentas bancarias de Antártica y Meldorek.
A partir de 2005, compró varios autos . En la causa figuran un Nissan modelo X Terra; un Citröen Azam M28 Sport; una Toyota Hilux (el dinero salió de la cuenta de Antártica), y un Nissan Murano Xtronic.
En menos de un año, su esposa, Marcela Zlotogorski, también imputada, adquirió dos autos 0 kilómetro: un Chevrolet Spark LT y un Kia, modelo Soul 1.6. El listado se completa con tres utilitarios que adquirió Meldorek y siete vehículos a nombre de Eagle Security & Investigation, también presidida por el contador. Esa última sociedad aseguró una Hummer H3 por la suma de $ 330.000
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